Cuantas veces no hemos oído y aplicado éste refrán? Entendemos perfectamente su mensaje, pero la raiz del mismo está en el hecho que el cachicamo hace una madriguera como casa, pero apenas se descuida, cuando sale a comer, la lapa se inroduce en ella y se apodera. Al pobre cachicamo no le queda más que hacer otra.
A la derecha el cachicamo, abajo la lapa
Nunca había visto una lapa! NUNCA!!!!
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