Guardatinajas es un apacible pueblito a orillas del río Tiznados, a 22 km de la carretera nacional que conduce a Calabozo.
La historia del pueblo reseñada en Wikipedia parte del año 1769 cuando fueron trasladados al sitio de Guardatinajas, indios guaiqueríes que residían en lo que para ese entonces se llamaba la Santísima Trinidad. Con ellos y otros indios fugitivos de las orillas del río Guárico, se dio comienzo a la Misión de Santa Bárbara de Guardatinajas, dirigida por los misioneros Fray Felipe de la Palma y Fray Feliz de Cortés, a la cual se agregaron familias españolas. Posteriormente la misión pasó a manos del Padre Cortés y quedó con el nombre de Guardatinajas.
En sus alrededores se ha ido desarrollado la producción agrícola de frutales, cereales y de ganado vacuno, además de constituir el principal sistema de riego de La Tahona.
A pesar del deterioro de sus edificaciones más antiguas, ha logrado mantener su conformación original.
Uno de los orgullos del pueblo es su iglesia en honor a Santa Bárbara, la patrona del pueblo y que tiene ya más de 100 años. La iglesia fue construida en 1905 por Antonio Forte D´Erario en honor a Santa Bárbara. Esta es una edificación de planta rectangular, con tres naves separadas por gruesas columnas de sección cuadrada, a las que se le adosan dos medias columnas
de menores dimensiones, de orden toscano, que sostienen las arcadas que unen a las columnas.
Además, cuenta con un vano de acceso lateral orientado hacia el oeste, y otro de servicio ubicado dentro de la sacristía, orientado en aquella misma dirección.
La nave central y el altar están separados por el arco toral, mientras las dos naves laterales rematan en los dos altares menores ubicados a ambos lados del presbiterio.
Posterior a los altares, y a lo largo del muro testero plano, se encuentra la sacristía. Al lado de la nave de la epístola y al borde de la fachada se halla la torre de planta cuadrangular, orientada al este y conformada por dos cuerpos. Su cubierta es a dos aguas y fue construida con una estructura tradicional. Su fachada principal está constituida por dos elementos básicos: el cuerpo bajo separado del suelo por un gran zócalo, y el frontispicio, en cuya fachada se encuentran los tres vanos de acceso a las tres naves.
En esta iglesia se exhiben varias imágenes religiosas de importancia como la Virgen del Carmen, la Virgen de Lourdes, la Dolorosa, el Nazareno, el Santísimo Corazón
de Jesús, San José y el Niño, y San Antonio de Padua. Todas estas imágenes son de yeso y representan importantes patrimonios del pueblo.
Los hijos más famosos de Guardatinajas son Pedro Oropeza Volcán, Dámaso Figueredo, Santiago Rojas, Fabián Torrelles y Nicolás Llovera. De todos les comentaremos brevemente más adelante.
Entre las leyendas destacadas del pueblo están La Mata del Guarataro y El Muerto de la Mata del Mono. La primera también llamada El Muro del Guarataro, se trata de un lugar abandonado en la carretera que va a La Tahona, donde deambula un espíritu en torno a un Guarataro. Se dice que el espanto enreda los pasos del caminante o tranca los vehículos de quienes transitan por esos lados en la noche. Al punto que se difundió un decir de la gente de los alrededores: “Si logra pasar El Guarataro, llegas a La Tahona”.
La segunda Leyenda se ubica en la Carretera vía Las Ventanas, altura de La Mata del Mono y cuenta que en un pequeño bosque de Guardatinajas aparece guindado de un árbol el fantasma de un hombre que asusta a las personas, principalmente a los fiesteros que transitan solos por el lugar, ya sea de día o noche.
Lo bonito de los pueblos lo conforma en mucho la gente que lo habita, que con su trabajo humilde y laborioso le dan vida especial a esos rincones. Queremos mencionar aquí algunas de las personas que se destacaron y que quedaron en los registros del IPC, como patrimonio cultural de Guardatinajas:
Piñatas de tapara de Ligia de Figueredo
Doña Ligia utilizaba el fruto del taparo, para fabricar las piñatas más solicitadas de la comunidad y de las zonas cercanas.
Luego de escoger las taparas más voluminosas y extraer su contenido a través de un orificio, son adornadas con papel crepé o de seda, para modificarlas luego hasta obtener figuras de animales.
Seguidamente les coloca un asa de alambre en su extremo superior del cual será atada a una cuerda que la elevará, para ser apaleada por los niños en las fiestas infantiles.
Son dos artistas de música popular que cantan, contrapuntean, tocan el cuatro y las maracas.
Muy conocidos por los lugareños, han compuesto diversas canciones con las que desean
dar a conocer su pueblo y mantener las tradiciones del Llano, como El Gabón de la Ceiba, Entre
Cojedes y Barinas, La mujer Caminadora y Los Días de la Semana, muchas de ellas interpretadas por Jorge Colmenares, entre otros cantantes de música tradicional.
Imagen Manuel Abrizo |
Encarnación Mireles y Carmen Sabina Belisario
Ambas llaneras de han destacado en el arte culinario con dos postres tradicionales típicos de la región y de los cuales ellas son las máximas exponentes.
Encarnación Mireles se hizo famosa con sus Rúscanos, postre tipo melcocha elaborado a base de las patas de la res, mientras que Carmen S. Belisario se destacó en el pueblo por sus orejitas dulces, postre tradicional que se consume principalmente después de las misas de aguinaldo y que son como las arepitas dulces pero con una forma especial que semeja una oreja.
Ambas recetas las colocaremos en otra entrada.
Jesús Gervasio García:
Famoso artesano del pueblo, que trabaja con tejidos, arcilla y madera, elaborando chinchorros, tarrayas de nailon, cucharas y cucharones, bateas, pilones, campechanas de cuero, cerámicas y
paletas de maderas. Desarrolló mucho arte en la talla en madera al punto de considerarse el mejor artesano del estado Guárico.
Ha participado en diversos eventos culturales, recibiendo numerosos
reconocimientos.
Manuel Abrizo lo entrevistó y publicó la entrevista en el libro Camino al Orinoco – Apure, editado por el Ministerio de Planificación:
De pequeño soñaba que sería un famoso cantante. “Se imaginaba, mirándose en el espejo que el día en que tuviera un sombrero pelo e´ guama encima, un liquiliqui blanco o amarillo y una guitarra grande, hasta Dios se asomaría a verlo”. Sin embargo la vida lo llevó por otros caminos para convertirlo en un representativo artesano de Guardatinajas.
Imagen: SanJuan de los Morros, blogspot |
en un programa de televisión junto a Tío Simón. Muere el 20 de octubre de 2004, pero aún es recordado y considerado como un personaje importante en la comunidad de Guardatinajas por sus destrezas con los instrumentos folklóricos y el traspaso de sus conocimientos musicales.
Nicolás Llovera
Definitivamente una leyenda, fue hombre apreciado en el pueblo pero que también inspiró cierto temor porque se decía que había obtenido su inmensa fortuna tras un pacto con el maligno.
Entre las historias que cuentan los habitantes del pueblo sobre este personaje, está el de una mujer negra, de pelo largo, con un solo diente, que cargaba un bojote y una caja metálica que lo visitó en una oportunidad. Como Nicolás no estaba en casa, la mujer se acostó en la hamaca a esperarlo. Cuando el hombre llegó hablaron a solas, después la vieja salió para regresar al día siguiente. Finalmente se fue para Calabozo sola. La gente sostiene que esa mujer era María Lionza.
Don Nicolás a pesar de no tener estudios, era muy inteligente y de temperamento muy dominante, llegó a tener cinco hatos. Conocía y trabajaba a la perfección las faenas llaneras.
Don Antonio Colmenares, hombre del pueblo que trabajó con él, recuerda que cuando llegaba a Guardatinajas, amarraba su caballo e invitaba aguardiente a todos los presentes en la cantina (tal como lo dice la canción de Dámaso Figueredo).
También donaba anualmente Bs 500 (un dineral para la época) para las fiestas patronales de Santa Bárbara.
“Era un viejo serio y mal encarado. Dormía en un chinchorro con los bolsillos llenos de rial y la boca abierta. Nadie lo robaba”
Entre sus bienes se contaban, además de los cinco hatos, 120 caballos, un pueblo de peones y mujeres, 50.000 cabezas de ganado y 200 gatos.
Acumuló muchísimos gatos negros, la gente dice que no se sabe cuántos. Este hecho acrecentó el misterio en torno a su persona. Dicen que a su casa iban muchas culebras amarillas.
No tuvo descendencia y sus herederos perdieron la inmensa fortuna en apenas dos años. Nicolás Llovera había nacido en 1892 y falleció en 1984.
Otros dos personajes famosos nacidos en Guardatinajas, además de Dámaso Figueredo, son Santiago Rojas y Pedro Oropeza Volcán, de los cuales hablaremos en una entrada posterior.
Fuentes Consultadas: Camino al Orinoco-Apure; Cuadernos IPC y Wikipedia
Fuentes Consultadas: Camino al Orinoco-Apure; Cuadernos IPC y Wikipedia
Para finalizar les colocaremos un video con imágenes del pueblo y la canción Guardatinajas en la voz de Dámaso Figueredo, otro digno hijo de esa tierra.
ARTISTA RELACIONADO: DÁMASO FIGUEREDO
Gracias Maylida por su comentario sobre Guardatinajas, un pueblo que no conozco pero ne lo describió con detalles doña Carmen Sanchez, docente de ese pueblo, a quien conoci en Caracas y la coloque como persona patrimnio cultural den Mision CUltura. Desde La ciudad de Mendoza, Argentina, reciba un calido saludo. Carlos Lucero
ResponderEliminarcarloslucero@mail.com