A raiz de un poema de nuestro amigo Yorman Tovar que nos gustó mucho, queremos dedicar nuevamente una entrada al Totumo (Crescentia cujete). La entrada original, de la pluma del Profesor Omar Carrero había sido publicada en enero de 2014. Hoy la retomamos y completamos con el mencionado poema.
Luego duerme la peonada
en los caneyes del hato.
Y un toro viejo araguato,
se oye pitá en la cañada.
despierta la madrugada,
el gallo desde un totumo,
viene el alba y sus lebrunos
canturrea el ordeñador,
¡A zambo madrugador!
desde un chinchorro grita uno.
José Vicente Rojas
Anochecer sobre el Llano
He de mencionar que en esta etapa de mi vida, se ha despertado un especial interés por las plantas y sus usos, interés que ha tenido una maravillosa acogida en la Universidad Autónoma de Chapingo en Texcoco, México, que tiene una cátedra muy amplia de Fitotecnia y muchas especialidades en medicina tradicional mexicana, ciencias que se están rescatando a gran velocidad por la efectividad de su uso.
TOTUMO: UNA PLANTA BIEN PLANTADA
Omar Carrero Araque
Baquiano
2010
La palabra Totumo parece derivarse de una voz indígena que significa “para todos” (4). A esta planta también se le llama Taparo, un término que igualmente utilizado en Panamá, Colombia y Bolivia. En Cuba y México se le llama Jícara; Mate en Ecuador; Huacal en Honduras y El Salvador; Cutuco y Cuchara en El Salvador; Calabazo, Guaje cirial y Gὓira, en México. En otras partes del continente se le conoce con los nombres de Hayal, Higὓero, Morro, Choca, Cuyabra y Tima. (1)
Esta planta adquirió tal importancia entre las naciones indígenas que vivían en América, que la misma era cultivada con esmero en los solares de los bohíos como despensero de utensilios, madera y medicinas; cuyo uso intenso en un principio, ha ido decayendo a medida que han ido apareciendo sustitutos de sus productos derivados.
En la siguiente relación, mediante la enumeración de algunos tópicos se resalta el valor, pasado o actual, de esta especie vegetal.
EL TOTUMO O TAPARO y SU UTILIDAD
La mata de Totumo fue cultivada en casi todas las casas de los ambientes rurales por la utilidad que prestaba, principalmente con sus frutos. Se sabe que con éstos se podían fabricar utensilios de cocina; cántaros para almacenar o transportar agua; recipientes para guardar granos o suero; biberones para los infantes, receptáculos para panales de abejas; materos para los jardines colgantes; boyas para pescar, “casas” de aves domesticadas como pericos y loros y por último, totumas para bañarse a orillas de los ríos y caños, plagados de caribes. En artesanía su fruto se usa aún para fabricar máscaras, piñatas, lámparas y adornos. También sirve para la elaboración de instrumentos musicales como charrascas y maracas. En la actualidad muchas calles y avenidas del país se engalanan con esta planta en un gesto que le suma su utilidad ornamental.
Como medicinal se le atribuye un carácter curativo del asma, paperas, hemorroides, hemorragias, dolor de oídos, parásitos, contusiones, dolores de cabeza y ulceraciones. En veterinaria se usa para curar la sarna de los perros. (2)
En un trabajo realizado con los pobladores de las lengüetas geográficas de Apure y Barinas se conocieron diversos beneficios que brinda esta planta, entre los que se destacan los siguientes: (3)
De los frutos de forma alargada, partidos longitudinalmente en cruz, se sacan las cucharas o los cucharones que sirven para sacar la sopa de la olla o para comer esta sopa. Con este mismo tipo de fruto, pero partido transversalmente cerca del extremo superior, se fabrica el Cucay o Mucurita, recipiente para colocar la sal encima del fogón evitando así su hidratación. Del taparo "pajuil" se hace la cona, un aparejo usado para sacar agua del caño quitándole la "tapa" y amarrándole un bejuco a manera de asa.
Con los frutos del totumo de caño o mucurita (C. amazonica) de dimensiones pequeñas (± 6 cm x 4 cm) se hacen las "onoteras", unos recipientes agujereados y provistos de un mango, donde se guarda el onoto enmantecado. También con este tipo de fruto se hacen muy buenas maracas.
Del totumo redondo (± 15 cm x 15 cm) se hacen los recipientes para sacar agua de los tanques o para beber. Este mismo totumo, agujerado y provisto de un mango largo, de un metro aproximadamente, se convierte en "la ramillona", que sirve para descachazar el melao cuando ya está hirviendo. Los biberones teteros para los lactantes se hacen con una "totuma" pequeña si se le coloca una mamila en el extremo donde está “el ombligo” de la tapara. Con los frutos tiernos se hacen "bueyes" de juguete, poniéndoles cuatro palitos a manera de patas, dos para los cachos y uno para el rabo. La madera del totumo, al igual que la del guayabo de caño, "por lo dura y zumbadora" sirve para fabricar muy buenos trompos. De las ramas del taparo se sacan las horquetas para las fondas o caucheras.
El uso tal vez más generalizado en las casas campestres y en los poblados llaneros es la utilización del árbol de totumo como Palo Gallinero. En el medio rural es una necesidad mantener en cada casa “un patio de gallinas” que asegura la provisión diaria de huevos y eventualmente de carne. El Totumo es utilizado preferentemente como dormitorio de estas aves en función de su modelo arquitectural que le da una ramazón casi horizontal, con ramas no muy gruesas y cubiertas con una concha rugosa, condiciones necesarias para que las aves tengan mejor agarre y seguridad, además, como esta planta se ramifica a poca altura su acceso por las aves de corto vuelo, como las gallináceas, se hace más fácil.
EL TOTUMO O TAPARO EN LA LENGUA COLOQUIAL
Los términos Totuma o Tapara han ganado terreno en el habla coloquial particularmente mediante refranes, sentencias o cantares. Por ejemplo, cuando se quiere hablar de algo oculto o no muy claro se dice “que aquí hay gallo entaparao” es decir como si ese algo estuviera guardado en una tapara. (3) Otras veces, para señalar a alguien como muy bruto se le dice que “es más tapao que un taparo”. (4) Para la época decembrina era común escuchar cantos de aguinaldo en los que se que mezclaba lo religioso con lo pagano: “Los Tres Reyes Magos llegaron de Oriente con sus Taparitas llenas de aguardiente” (5) Si una persona ha tenido malas mañas por más que manifieste un cambio de conducta, esta se mantiene en duda, algo que se interpreta a través del dicho: “Perro que come manteca mete la lengua en Tapara”. (5). Con la expresión verbal “Totumear” se manifestaba la acción de pensar o recapacitar, quizá por asimilar la forma de la cabeza con una totuma (5) La sentencia actual “se juntó el hambre con las ganas de comer” anteriormente se exponía como “Se juntó la arroba de queso con la tapara e melao” (5) Para señalar irónicamente que a alguien a quien le cortan el pelo a la usanza de algunas etnias indígenas se le dice que “le echaron un Corte Totuma”. Como hecho jocoso se destaca que en el estado Lara llaman Taparas a los testículos del hombre. Este evento dio pie a una anécdota que recuerda cuando el conductor de un programa radial en El Tocuyo, frente a la cantidad de huecos que había en las calles le pidió al Presidente del Concejo Municipal, las tapara. En el mismo sentido, pero esta vez en el llano-llano, llaman taparas a los senos de las mujeres sobre todo cuando son muy grandes.
Los términos Totuma o Tapara han ganado terreno en el habla coloquial particularmente mediante refranes, sentencias o cantares. Por ejemplo, cuando se quiere hablar de algo oculto o no muy claro se dice “que aquí hay gallo entaparao” es decir como si ese algo estuviera guardado en una tapara. (3) Otras veces, para señalar a alguien como muy bruto se le dice que “es más tapao que un taparo”. (4) Para la época decembrina era común escuchar cantos de aguinaldo en los que se que mezclaba lo religioso con lo pagano: “Los Tres Reyes Magos llegaron de Oriente con sus Taparitas llenas de aguardiente” (5) Si una persona ha tenido malas mañas por más que manifieste un cambio de conducta, esta se mantiene en duda, algo que se interpreta a través del dicho: “Perro que come manteca mete la lengua en Tapara”. (5). Con la expresión verbal “Totumear” se manifestaba la acción de pensar o recapacitar, quizá por asimilar la forma de la cabeza con una totuma (5) La sentencia actual “se juntó el hambre con las ganas de comer” anteriormente se exponía como “Se juntó la arroba de queso con la tapara e melao” (5) Para señalar irónicamente que a alguien a quien le cortan el pelo a la usanza de algunas etnias indígenas se le dice que “le echaron un Corte Totuma”. Como hecho jocoso se destaca que en el estado Lara llaman Taparas a los testículos del hombre. Este evento dio pie a una anécdota que recuerda cuando el conductor de un programa radial en El Tocuyo, frente a la cantidad de huecos que había en las calles le pidió al Presidente del Concejo Municipal, las tapara. En el mismo sentido, pero esta vez en el llano-llano, llaman taparas a los senos de las mujeres sobre todo cuando son muy grandes.
EL TOTUMO O TAPARO EN LA TOPONIMIA
Algunas plantas cuya presencia haya quedado guardada en la memoria de los pueblos han servido como marcadores de lugares, tal como se aprecia en los nombres de Higuerote, Guasdualito o Cabimas para citar sólo tres de los cientos de fitotopónimos que se registran en Venezuela. Para el caso del Totumo o Taparo se reconocen 36 lugares identificados con estos nombres a lo largo y ancho del país, tal como lo señala Casale (7)). Además y particularmente en el llano, muchos hatos y fundos se identifican con el nombre de Totumo. En la historia del Alto Apure todavía se recuerda el cambio de hatos que a finales del Siglo XIX llevaron a cabo Don Manuel Fuentes y Doña Francisca Vásquez de Carrillo. El primero, dueño de Mata e´ Totumo, en Apure y la segunda, de La Maporita en Arauca (Colombia). Doña Pancha Vásquez, una vez instalada en Mata e´Totumo, se hizo famosa no solo por su riqueza sino por la leyenda tenebrosa que se creó ante su figura y que sirvió de inspiración a Don Rómulo Gallegos para el personaje de Doña Bárbara.
Algunas plantas cuya presencia haya quedado guardada en la memoria de los pueblos han servido como marcadores de lugares, tal como se aprecia en los nombres de Higuerote, Guasdualito o Cabimas para citar sólo tres de los cientos de fitotopónimos que se registran en Venezuela. Para el caso del Totumo o Taparo se reconocen 36 lugares identificados con estos nombres a lo largo y ancho del país, tal como lo señala Casale (7)). Además y particularmente en el llano, muchos hatos y fundos se identifican con el nombre de Totumo. En la historia del Alto Apure todavía se recuerda el cambio de hatos que a finales del Siglo XIX llevaron a cabo Don Manuel Fuentes y Doña Francisca Vásquez de Carrillo. El primero, dueño de Mata e´ Totumo, en Apure y la segunda, de La Maporita en Arauca (Colombia). Doña Pancha Vásquez, una vez instalada en Mata e´Totumo, se hizo famosa no solo por su riqueza sino por la leyenda tenebrosa que se creó ante su figura y que sirvió de inspiración a Don Rómulo Gallegos para el personaje de Doña Bárbara.
LOCALIDADES IDENTIFICADAS CON LOS NOMBRES DE TOTUMO O TAPARO
Taparales, Táchira ; El Taparo de Altagaracia, Zulia; El Taparo del Consejo, Zulia; El Taparo, Anzoátegui – Aragua – Mérida – Portuguesa – Sucre - Zulia; Los Taparos, Falcón; Taparote, Bolívar; Taparito, Falcón – Guárico; Los Taparones, Zulia; Totumo, Bolívar; Totumal, Barinas; El Totumal, Mérida; Totumales ,Táchira; Totumito, Apure – Cojedes– Lara – Miranda; Totumitos, Apure – Portuguesa; El Totumo, Anzoátegui – Apure – Aragua –Barinas – Sucre; Los Totumos, Lara - Mérida
Taparales, Táchira ; El Taparo de Altagaracia, Zulia; El Taparo del Consejo, Zulia; El Taparo, Anzoátegui – Aragua – Mérida – Portuguesa – Sucre - Zulia; Los Taparos, Falcón; Taparote, Bolívar; Taparito, Falcón – Guárico; Los Taparones, Zulia; Totumo, Bolívar; Totumal, Barinas; El Totumal, Mérida; Totumales ,Táchira; Totumito, Apure – Cojedes– Lara – Miranda; Totumitos, Apure – Portuguesa; El Totumo, Anzoátegui – Apure – Aragua –Barinas – Sucre; Los Totumos, Lara - Mérida
EL TOTUMO COMO EMBLEMA
En retribución a los beneficios que algunas plantas ofrecen a un país, región o localidad, se acostumbra en algunos casos, nombrarlas como emblema. En el caso del Totumo su valiosa asistencia al hombre y a la mujer ha sido reconocida por las autoridades del municipio Antolín del Campo en el estado Nueva Esparta mediante su declaración como Emblema de este municipio. Su elección fue producto de una consulta popular a la que se sometieron otras 18 plantas. A la vista de los resultados los ediles emitieron un decreto en la Gaceta Municipal del 13 de septiembre de 2007, mediante el cual se declaraba su condición de Emblema. (6)
En retribución a los beneficios que algunas plantas ofrecen a un país, región o localidad, se acostumbra en algunos casos, nombrarlas como emblema. En el caso del Totumo su valiosa asistencia al hombre y a la mujer ha sido reconocida por las autoridades del municipio Antolín del Campo en el estado Nueva Esparta mediante su declaración como Emblema de este municipio. Su elección fue producto de una consulta popular a la que se sometieron otras 18 plantas. A la vista de los resultados los ediles emitieron un decreto en la Gaceta Municipal del 13 de septiembre de 2007, mediante el cual se declaraba su condición de Emblema. (6)
EL TOTUMO EN LAS CANCIONES
Una planta con tan amplio abanico de oportunidades de uso como el Totumo, no podía pasar desapercibida para los músicos y compositores criollos quienes muchas veces logran su inspiración apoyándose en elementos del entorno, como en el caso del Profesor Benito Canónico, músico de la Orquesta Típica Nacional (5) y papá de Daniel “Chino” Canónico, uno de “los héroes” del Campeonato Mundial Amateur ganado por Venezuela en 1941, quien compuso la canción El Totumo de Guarenas, una pieza que ya es considerada como uno de los emblemas del folklore nacional. (8)
Una planta con tan amplio abanico de oportunidades de uso como el Totumo, no podía pasar desapercibida para los músicos y compositores criollos quienes muchas veces logran su inspiración apoyándose en elementos del entorno, como en el caso del Profesor Benito Canónico, músico de la Orquesta Típica Nacional (5) y papá de Daniel “Chino” Canónico, uno de “los héroes” del Campeonato Mundial Amateur ganado por Venezuela en 1941, quien compuso la canción El Totumo de Guarenas, una pieza que ya es considerada como uno de los emblemas del folklore nacional. (8)
EN CONCLUSIÓN
Se ha querido mostrar el importante papel que en tiempos recientes jugó el Totumo en la vida de las comunidades pueblerinas, un papel ahora desplazado por el arribo “del progreso” hasta los mismos núcleos rurales, con su carga de productos mayormente manufacturados que han mandado al tiesto a buena parte de los utensilios aborígenes.
Se ha querido mostrar el importante papel que en tiempos recientes jugó el Totumo en la vida de las comunidades pueblerinas, un papel ahora desplazado por el arribo “del progreso” hasta los mismos núcleos rurales, con su carga de productos mayormente manufacturados que han mandado al tiesto a buena parte de los utensilios aborígenes.
Tal como lo describe el profesor Carrero, el totumo tiene múltiples usos en la vida diaria del llanero. Y Yorman Tovar, poeta portugueseño nos regala estos versos llenos de amor hacia esta planta maravillosa: