Ilustración de Edgardo Briceño, el pintor de la naturaleza Apureña |
El corrido de la montaña, era un canto que entonaban los peones en momentos de parada, y contaba en sus primeras y últimas estrofas, los peligros y características de la selva. En el cuerpo del corrido, se cantaba a las 32 travesías, resaltando aquellas que ofrecían mas peligros. A continuación se transcriben algunas coplas de este corrido, tomadas de Por los Llanos de Apure:
Montaña de San Camilo
Montaña bien esparcida
Donde se pierden mil reses
En la primer travesía
Montaña de San Camilo
De treinta y dos travesías
Qué dando buenas jornadas
Se pasan en cuatro días
Montaña de San Camilo
Tragadero de cristianos
Donde descansan las muelas
Y trabajan pies y manos
A refrán bien verdadero
El que dijo San Alejo
Que el monte de San Camilo
No se hizo pa´ los pendejos
(sustituido por “zoquetes” en Por los Llanos de Apure”)
Comenzaré po¨El Escoplo
Que fue la primer tragedia,
La segunda es “La Ribera”
Y la tercera en “El Loco”.
Cuatro llevo en “EL Biscocho”,
Que en “San Agustín” son cinco
Y en “Vielma” se juntan seis.
Y así continuaba el canto hasta nombrar las 32 travesías, llegando al puerto de Teteo.
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